Si hay caos, que sea para que Dios lo ordene
Probablemente lo primero no lo podremos evitar, muchas veces se escapan de nuestras manos algunas situaciones y se convierten en un caos total.
¿Cuántas veces lo que comienza como algo sencillo se convierte ante tus ojos en algo completamente desastroso? Quizás más veces de las que quisiéramos.
Pero es maravilloso saber que cuando hay caos Dios puede mostrar su Poder, su amor y misericordia con nosotros.
Así como un bebé que come papilla y cuando termina es un completo desastre, su mamá o papá lo limpia, lo cambia y queda como nuevo, para ése bebé sus padres son los héroes de la historia.
Pues, en nuestro caso no es una papilla, pero puede ser una situación familiar, financiera, emocional, donde comenzamos a andar y cuando nos damos cuenta ya es tarde, se escapó de nuestras manos y ahora vemos el caos delante de nosotros.
Aquí entra Papá Dios, Papito bello, nuestro Abba Padre y Génesis 1:1-3 nos muestra un claro ejemplo de lo que Dios puede hacer:
- Dios, en el principio, creó los cielos y la tierra.
- La tierra era un caos total, las tinieblas cubrían el abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la superficie de las aguas.
- Y dijo Dios: «¡Que exista la luz!» Y la luz llegó a existir.
Con solo una palabra Dios fue solucionando el caos hasta que hubo orden nuevamente.
Pero para que esto ocurra en nuestra vida, debemos permitir que Dios haga su parte. Así como el bebé que lloró porque no le gustaba el desorden y vinieron los padres al rescate, nosotros podemos orar, derramarnos y pedirle a Dios que ordene nuestro caos, nuestro desorden, y pedirle que nos ayude a no caer en lo mismo nuevamente. Y aún si volviéramos a caer, no alejarnos, sino llamar a Dios y pedirle ayuda.
No digo con esto que todo se arreglará mágicamente, eso no ocurre en la vida real, pero sí es cierto que Dios comenzará a aclarar tu mente, colocará a las personas adecuadas, y te dará la palabra que necesitas para accionar sobre aquello que debes ordenar.
Así que si necesitas orden en tu vida, te invito que leas esta oración en voz alta:
Señor Jesús, hoy vengo a ti, necesito de tu ayuda, siento un vacío, un caos en mi mente por lo que me está pasando y sé que con mis propias fuerzas no resolveré nada. Trae orden a mi vida, trae la paz que necesito para tomar las decisiones adecuadas. Dame el ánimo, y la fuerza para permanecer firme mientras todo este caos comienza a ordenarse. Enciende la luz en mí y permíteme ver aquello que debo cambiar. Y gracias Padre por escucharme, Amen.
