La Biblia fue inspirada por Dios y útil para todo. Si lo has experimentado
entonces entiendes a lo que me refiero y si no, te lo explico a continuación.
La escritura es útil para nuestra enseñanza (Romanos 15:4), con ella podemos aprender diferentes cosas, manteniendo la esperanza. Pero esto no es todo, ya que lo mencionado se logra por medio de la paciencia y la consolación de las escrituras.
La biblia nos muestra historias que nos hacen tener esperanza, a fin de glorificar a Dios en todo. Tenemos la historia de David desde que cuidaba las ovejas hasta convertirse en Rey, una Sara estéril que da a luz a su hijo también ya avanzada de edad. Por otra parte una mujer enferma que padecía flujo de sangre con más de 12 años en ese estado y es sanada al tocar el borde del manto de Jesús.
En la palabra están escritas historias reales con el propósito de que no perdamos la confianza en Dios y lo glorifiquemos al experimentar cosas semejantes. En la escritura se refleja el amor, bondad, justicia, misericordia, poder y fidelidad de Dios.
Algunas historias nos dejan enseñanzas a pesar de que no hicieron la voluntad de Dios como el caso de Jonás. Por otra parte esta Job que pasó por momentos fuertes pero glorificó al Señor.
Que asombroso y maravilloso es saber que al hacer la voluntad de nuestro padre, tenemos la confianza de que todo obra para bien.
Dios nos consuela en todo, nunca debemos dudar de quien es Él y cuanto nos ama. Por eso ¡Glorifícalo en todo!
Tenemos como máximo ejemplo a Cristo ¡abre tu boca, alaba y exalta al padre! Dios es quien libra nuestras batallas, nos da la salida ante las pruebas, nos fortalece en nuestras debilidades. Cada cosa que Dios permita en tu vida alábale, exáltalo, proclama sus maravillas.
“Pero el Dios de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, para que unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo” (Romanos 15:5-6).
